La «déesse» y los holandeses

GF - 06/10/2009

el manco...
Escribir sobre un auto mítico como la DS «déesse», diosa en francés, donde los autos no son «el» sino «ella» (la voiture) no es algo demasiado fácil. Primero porque se ha dicho tanto sobre este vehículo y segundo porque, ¿quién soy yo para hablar de semejante obra?

Teniendo en cuenta esto último, propongo simplemente contar algunas de mis vivencias personales no sólo con los más de 5 o 6 DS que tuve a lo largo de mi estancia de 15 años en Europa sino también mucho antes de esto.
Desde que tengo memoria, siendo muy chiquito allá por la década de los sesenta, la DS ejerció en mí una fascinación muy especial. Recuerdo que a la edad de de 6 o 7 años haberla visto por primera vez en un número de la revista Parabrisas donde me impresionó tanto que a partir de allí se convirtió en una obsesión el tratar de ver alguna vez en vivo ese aparato extraterrestre.

En la Argentina recién muchos años más tarde, en los ochenta, tuve esa oportunidad, ¡y además estaba en venta! Lamentablemente al único Citroën al cual hubiera podido llegar en aquel momento era a un 2CV usado…
Los años pasaron y de tanto en tanto afloraban en mí mente irrefrenables accesos de índole casi neurótico con respecto a ese auto y no podía hacer otra cosa que por lo menos dibujarlo, lo que finalmente es una manera de atraparlo, de tenerlo, como hacían los hombres de las cavernas cuando pintaban sobre las paredes la presa que querían cazar…

En los noventa recién llegado a Europa y una vez instalado, evidentemente lo primero que hice fue ponerme en campaña para conseguir uno (o una). La búsqueda me llevó hasta la ciudad de Versailles (citée royale!) donde un médico jubilado vendía su D Super año ’74 primera mano beige con techo blanco. Apenas la vi, impecable con 70000 km supe que era ella!

A pesar de que el precio no era para nada excesivo (en aquel entonces era todavía y simplemente un auto usado más), mi lado tano me llevó a negociar el precio de una manera casi indecente frente a este anciano moribundo.
Pagué los diez mil francos y me embarque en la nave.

la_primera21
Esa fue la primera. Con ella (y mi mujer embarazada) fuimos a la maternidad el día que nació mi primer descendiente y también de vuelta fue en lo primero que viajó el pobre retoño… Hay que reconocer que una D Super con caja manual de cuatro velocidades un embrague duro y un motor de la prehistoria que erogaba a duras penas 100 caballos no representaba el placer de manejo absoluto, ni por asomo. Pero bueno la DS era un auto muy particular incluso para su época; sistema hidráulico que comandaba casi todo, dirección, frenos, suspensión.

El primer contacto solía ser catastrófico para alguien acostumbrado a un auto normal. A la primera frenada el acompañante casi salía disparado por el parabrisas tal era la potencia y tan pobre la posibilidad de dosificar la fuerza con el «botón» que hacia las veces de pedal de los frenos (doble circuito hidráulico con discos en las cuatro ruedas!!) y ni te cuento lo que podía llegar a pasar luego de la primera «esquivada» de urgencia. En este caso el o los pasajeros eran expulsados por las ventanillas laterales tal era el agarre y la poca desmultiplicación de la dirección.

Por otro lado los movimientos de la carrocería absolutamente atípicos más cercanos a la práctica de la náutica deportiva que a los de un vehículo terrestre han hecho descomponerse a más de una generación de niños en viaje de vacaciones.Sin embargo, todo esto sobre lo que al principio había que acostumbrarse, luego formaba parte de lo maravilloso del auto. Con sólo rozar el freno, frenaba; con un dedo en el volante y el codo en la ventanilla se podía llevar la nave imperturbable por trazados tortuosos a velocidades hoy prohibidas, circular por todo tipo de rutas destrozadas sin ni siquiera enterarse, en fin, algo que ningún coche de los años sesenta podía hacer, ¡Imagínense entonces en los cincuenta cuando fue presentada!

Retomando mi historia, para que este idilio fuera completo a mi vieja D Super le faltaba algo, algo que es fundamental en ese auto y que la convierte en la verdadera «deèse».
El combo hidráulico de frenos, dirección y suspensión no está completo sin la caja con embrague automático, también comandado por el mismo circuito hidráulico. Todos estos órganos dependen del corazón y de su sistema circulatorio: la bomba hidráulica y los millones de tubitos que van y que vienen llevando el líquido hidráulico (rojo como la sangre en las primeras series y luego verde hasta hoy en día) para asistir y dar vida a los diferentes órganos vitales de la máquina.

Demás está decir que si este corazón comandado a través de una simple correa fallaba, o algún fuelle o tubito dejaba escapar el preciado líquido, la muerte por hemorragia o paro cardíaco era inevitable. No más frenos, dirección, suspensión, cambios….La diosa moría en el lugar paralizada y aplastada contra el piso. Bien lo recuerdan los primeros clientes, si es que todavía vive alguno. Sin embargo, hay que reconocer que con la evolución del modelo esto fue mejorando hasta tener una fiabilidad casi irreprochable hacia la mitad de su carrera.

Entonces me di cuenta que para experimentar realmente todas las sensaciones que podía otorgar la «déese» era absolutamente necesario encontrar una con caja «Hidráulica». Emprendí la búsqueda pero entre tanto se me cruzó otra muy especial, una D Super 5, que fue uno de los modelos más evolucionados que se fabricaron, con caja manual ya de 5 velocidades, cinturones de seguridad inerciales (casi un auto moderno) y con un kilometraje imposible de creer cuarenta y pico de mil!! No lo dudé y la caja hidráulica tuvo que esperar un tiempo más.

la_verde22

La verde (la D super 5 era verde) no la tuve mucho tiempo, no porque no me gustaba, vean la foto y van a ver que era impresionante su estado, sino porque ya a esa altura y frente a los ruegos de mi mujer habíamos adquirido un auto moderno para todos los días lo que hacía que la DS como segundo auto cuadrara difícilmente dentro de nuestro acotado presupuesto de entonces. Fue allí que descubrí una veta interesante: los holandeses.

Increíblemente en Holanda Citroën es casi como una marca nacional (vaya a saber porque, prometo enterarme) y los «dutch» son fanáticos de este aparato. Me enteré de esto porque a los pocos días de ponerla en venta un extraño caballero con acento foráneo me llamó haciéndome un interrogatorio con respecto al estado del auto digno del FBI.
Al parecer mis respuestas fueron convincentes y combinamos un rendez-vous para el día siguiente. Al otro día, a la hora señalada y en el lugar exacto dos «ursos» de un metro noventa se bajaron de un BMW con patente holandesa y pagándome lo que yo pensaba entonces era una fortuna partieron por la autopista del norte con mi DS verde, snif, snif….

Pero esto era solamente dar un paso atrás para mejor tomar carrera y saltar! Efectivamente esta plusvalía que hice con esta y otra más que compré y revendí rápidamente me permitió finalmente tener un resto y una justificación a nivel familiar para ahora si, buscar y encontrar la VERDADERA DS.

la_gris23
Esto sucedió bastante rápido y en el lugar menos esperado. Saliendo un dia de casa, a las pocas cuadras veo estacionada una DS 21 Pallas gris metal modelo 67 o 68, el tope de gama. ¡Increíblemente estaba en venta! Lucia un poco opaca por todos lados pero totalmente original y no le faltaba nada. Precio OK (igual siempre estaban los Holandeses ante cualquier urgencia) y entonces… Deal!

Recién allí entendí la verdadera dimensión de ese gran auto y el placer que procuraba su manejo. La palanca de cambios ubicada justo detrás del volante parecía más la palanquita del guiño que otra cosa. Una vez más hizo falta acostumbrarse a esta manera de pasar los cambios sin embrague y con una ergonomía bastante particular que hace que el conductor de DS tome una inconfundible posición que se reconoce inmediatamente.

Mano derecha en la parte superior del volante dedo índice extendido justo para tocar la parte superior de la palanca, empujoncito rápido con pulgar e índice hacia adelante para poner primera, brazo derecho flexionado.
Al mismo tiempo brazo izquierdo con el codo en la ventanilla abierta, excepto en invierno donde la mano y el brazo reposan entre el apoyabrazos de la puerta y el monorayo del volante en posición de marcha recta ubicado a las 7 hs, torso bastante vertical para llegar bien a la palanca, cuerpo totalmente sumergido en los asientos hiper mullidos, pie derecho que acelera y suelta para permitir poner segunda con un rápido movimiento hacia la derecha del dedo índice y sin soltar el volante, pierna izquierda en reposo sobre la alfombra de piso de 4 centímetros de espesor y voila, c’est parti!

Hay que reconocer que este idílico panorama estaba un poco opacado por la importante presencia en el habitáculo del ruido del motor pero que era convenientemente tapado por los ruidos aerodinámicos a partir de los 140 Km/h.
Con este auto fuimos una segunda vez a la maternidad, en este caso fue nena! Y también tuve la oportunidad de hacer algunos largos viajes. Recuerdo particularmente uno de Paris a Ginebra. Todo venia bárbaro, disfrutando del excelente comportamiento en ruta y andar suave de este ya antiguo DS, hasta que a la altura de tomar el desvío hacia Ginebra y adentrarse en los montes del Jura el auto empezó a fallar y fallar cada vez más… Yo veía el panorama cada vez más negro, (si esto se para, muere aquí mismo y ¿Quién me arregla este dinosaurio?)
Así seguimos varios kilómetros más pero la cosa estaba cada vez peor. Me dije que podría ser una basurita o algo en el carburador así que viendo la cara de de mi mujer con una expresión entre «te quiero matar» y pánico (los chicos por suerte dormían) decido acelerar a fondo. Increíblemente a partir de las 4500 vueltas dejaba de fallar, cuando bajaba de allí la cosa empezaba de nuevo, así que, cuento corto, la autopista y los túneles del Jura los conocimos a más de 160 km/h hasta llegar a Ginebra. Menos mal que en ese entonces (1995) no había muchos radares. Esto me permitió corroborar parte de la leyenda de la DS conocida en la década del 60 como la «reina de la ruta», ningún auto de la época podía mantener un ritmo tan elevado en total seguridad.

Llegados a Ginebra, en un taller me desarmaron el «carbu», lo limpiaron y santo remedio. Ahí me dije que mi próxima DS debería ser a inyección electrónica, «the top of the top».
Sin embargo esta me duró varios años. Finalmente la vendí (a otro Holandés por su puesto). Luego tuve un intermezzo en el que volví a Argentina por un par de años. Al retornar a Francia en el año 2000, nuevamente me puse en campaña para encontrar otra. En el ínterin casi la traiciono con una SM sa majesté (su majestad Citroën-Maserati) pero no me animé debido a la poca fiabilidad de este modelo. Finalmente encontré una DS 21 Pallas Injection éléctronique, que 4600 euros mediante fue mía. A esa altura de mi vida, mi presupuesto ya me permitía tener un «auto de colección» así que me puse a hacerle algunos trabajitos. Metiéndose un poco dentro de las tripas de este auto uno no deja de sorprenderse de la mezcla constante entre órganos mecánicos y materiales que parecen salidos directo de los laboratorios de la NASA (capot de aluminio, faros direccionales, techo plástico y todos los otros sistemas de asistencia y seguridad los que hablamos) y el caos al estilo «atado con alambre» de otras partes del vehículo. Insólito!
Según se dice, este coche jamás fue rentable para la marca, tremendamente sofisticado, complicado y caro de fabricar.

¿Como termina esta historia? Bueno con esta última DS, porque fue mi última. Con ella me di el gusto de hacer un viaje Paris Barcelona non stop. Resulta que en el 2002 me estaba mudando de Paris a Barcelona, los chicos y mi mujer ya habían partido y yo me quedé para terminar con las últimas cosas.
Salí de Paris a las cinco de la tarde del 3 de julio y tenía que llegar si o si el día 4 a Barcelona porque mi hijo más chiquito, el tercero, varón, cumplía su primer año de vida!

bebe1
Salgo con casi cuarenta grados de temperatura por la autopista del sur en plena salida de vacaciones de todo el mundo… (Allá los destinos de las vacaciones son hacia el sur) Así que ya empiezo con un gigantesco embotellamiento. ¡Veía como la temperatura empezaba a subir, la del auto y la mía! Tenia por delante más de 1200 km por recorrer, absolutamente solo, con un auto de treinta y cinco años de antigüedad al que con el apuro ni siquiera le había verificado el nivel de los líquidos…En fin cosas que uno hace (o no hace, mejor dicho)
El tema es que cincuenta kilómetros más adelante, después del peaje el tránsito se fluidifico y pude mantener una buena velocidad de promedio, sin embargo, al calor lo precedió una de las lluvias más impresionantes que he visto en mi vida. Los elementales limpia parabrisas de la DS no daban abasto ni por casualidad. Por el apuro no podía bajar el ritmo pero igual me tuve que acomodar a unos 140 km/h. No se veía un corno pero el auto seguía pegado a la ruta, una vez más la DS me sorprendía. Al cabo de cinco horas paro a repostar llegando al sur de Francia y siendo las once de la noche decido echarme a dormir agotado por el manejo bajo la lluvia.

Un motel, dos, tres, en ninguno hay lugar. Entonces decido continuar. Doble faro encendido, haz de luz direccional, impecable… La lluvia ya había parado y tuve un tramo de una hora tranquilo. De repente siento un violento «empujón» lateral que me hace desplazar sobre los cuatro carriles de la autopista de derecha a izquierda. Menos mal que a esa hora no había nadie. Retomo el control y sucede de nuevo, esta vez casi me aplasta contra el guarda-rail. Una fuerza invisible me zamarreaba de un lado para otro. ¡Mistral! A esta altura se preguntaran que tendrá que ver un Maserati en esta historia, y bien no es el auto sino su nombre heredado del famoso viento de esa zona del sur de Francia del golfo de Montpelier, el Mistral. Por favor, pensaba, que más me puede tocar a esta hora, cansado y sin dormir!

La verdad es que parecía mandado a hacer para testear todas las cualidades de este auto. La geometría de la suspensión delantera de la DS está hecha de tal manera que absorbe de manera admirable cualquier fuerza lateral e incluso se mantiene estable ante un posible reventón de un neumático. Allí donde un auto de su época hubiera terminado en la banquina, la DS continuaba una vez más, imperturbable.
Finalmente crucé la frontera española y llegue a Barcelona a las 3 de la mañana del 4 de julio. Diez horas para recorrer 1200 km, just in time!

Este autito me lo quedé hasta que nos volvimos definitivamente en el 2005 momento en que no me quedó otra que venderlo. Lamentablemente las trabas para importar autos antiguos en Argentina siguen siendo difíciles de superar, es una lástima…

bye-bye
Todavía recuerdo la sonrisa en la cara de quien me la compró cuando se la llevaba de vuelta a Francia y… Ese sí que no era holandés.

Un servicio para nuestros lectores!
Categorías: Crónicas
Fecha: 06/10/2009
9 Respuestas en “La «déesse» y los holandeses
  1. El "Camisado"

    Excelente! Muy linda y emotiva la nota. «La» DS es un verdadero icono en la historia del diseño de autos en Francia.

  2. el pobre retoño

    aca comenta el primer descendiente (pobre retoño?? Vas a ver). Yo crecí con la DS al lado mio, y tengo que admitir que es una maravilla. Me acuerdo perfectamente del día cuando anunciaste que habías vendido la ultima DS, a un precio barato por el apuro. Hasta yo quede pasmado. No podia dejar de imaginarme la cara de felicidad del comprador, ni tus ganas de sacarsela a patadas 😀
    Muy buena nota, se ve claramente la pasion que seguís teniendo por esta diosa… (dentro de poco te van a llamar para conferencias exclusivas de autitos viejos.)
    Segui asi pa :)

  3. Freddy Pereyra

    Es un placer leer estas vivencias de alguien con quien me he reencontrado hace poco tiempo. No tuve el privilegio de poseer una DS pero al menos pude disfrutar de todas esas cualidades, que bien describe aquí Gustavo, con mi amado CX Athena. Lo tuve diez años, y mantenía esos razgos de comportamiento de la DS en la dirección, el celoso freno, y la increíble suspensión. Hay un antes y un después de un Citroën hidroneumático… Gracias por la nota y muy bueno el sitio.

  4. Horo

    Nuevamente excelente nota, luego del 4L, llegue al 504, mas tarde al CX Athena. Nunca olvidaré su andar y la tecnología aplicada para la época. Un día se me rompió la correa de la bomba hidraulica y se transformo en el andar de un Ford T, aunque llegué perfectamente a destino. Saludos y nuevamente gracias por la nota.

  5. Leonel

    Gustavo, excelente la nota y gracias por compartir tu experiencia con los «voituristas» nostálgicos de las hermosuras de otras décadas. Dentro de mis «cosas por hacer» está anotado: recorrer Francia a bordo de una DS (si es con una morocha al lado mejor); y creo que luego de leer tus anécdotas subió un par de escalones en prioridad.

    Saludos!

  6. Mariano

    El amor de los holandeses por los Citroën podrá deberse a que la familia Citroën es de origen holandés?
    Qué coche. Los ves en persona, 54 años después de haber sido lanzado y se te cae la madíbula (por no decir otra cosa impropia).

  7. tete

    Una nota buenisima como todas las del autor GF, sus notas no tienen desperdicio.
    saludos

    TT

  8. cinturonga

    Excelente relato GF! asi me gustan las historias con lujo de detalles y llenas de anécdotas. Casi un año tarde la encuentro.
    Carinho glande, Cinturonga.

  9. Guille CF

    No pude evitar volver a leer hoy este impecable relato que define de modo tan cálido la apasionante relación entre un hombre y su «déesse»…

    Tristeza. No hay palabras.

Deje un comentario

Tiene que estar registrado para comentar.

Otras notas que pueden interesarle

Dos ruedas enigmáticas

orisontal

Con el simil Aston Martin que me publicó RETROVISIONES parezco haber, sin mala intención, revuelto el avispero. Aunque si tengo que ser sincero, tengo que admitir que el Bocha Balboni (cuando no), parece andar bastante cerca de la no tan difícil solución. Repasando álbumes amarillentos me topé ahora con otro misterio: una moto que por su […]

Federico Kirbus
24/02/2010 6 Comentarios

Se vienen los fantasmas

XI Rally de los Fantasmas 2015

El club Fiat Clásicos, asociación que cuenta con muchos lectores de nuestras páginas, inaugura como todos los años la actividad vernácula de regularidad con su ya conocido (y reconocido) Rally de los Fantasmas. Más abajo leerán la invitación oficial enviada por la secretaría del club: Estimados Amigos, Tenemos el agrado de anunciar la edición 2015 […]

retrovisiones
20/02/2015 Sin Comentarios

Countach!

pistolita

Gallizio es un personaje de los que quedan muy pocos en el mundillo del automóvil en Turín. Setenta y tantos nunca confesados, porte de dandy, labia fácil y eterno bronceado, distinguen a uno de los mejores proyectistas de autos y prototipos que se hayan conocido en las últimas décadas. En los noventa, junto a su socio, construyeron […]

Hernán Charalambopoulos
23/09/2009 5 Comentarios

Sin título

huaaaaaaaaaaaaaaa

No vamos a comentar lo que aparece en las fotos por el simple motivo que nos dejó sin palabras. Huelgan las descripciones y el floreo ante un objeto semejante. Les pedimos a ustedes como espectadores que completen con sus comentarios la obra retratada. Ferrari 166 Berlinetta Touring. Museo » Casa di Enzo Ferrari», Módena.

Hernán Charalambopoulos
12/06/2012 16 Comentarios

451 días, 451 clásicos

Lincoln cola y ruta

Lincoln Premiere 1957 fúnebre, Ruta 21, Colonia del Sacramento, Uruguay.

Diego Speratti
17/09/2011 Sin Comentarios

699 días, 699 clásicos

Dodge y Hotel argento

Dodge Brothers Special phaeton 1924, Rambla de los Argentinos, Piriápolis, Maldonado, Uruguay.

Diego Speratti
19/02/2013 13 Comentarios

Cartel de miércoles #35

stup!

San Isidro, Prov. de Buenos Aires, Argentina. Gracias RS.-

retrovisiones
03/07/2013 2 Comentarios

Cartel de miércoles #97

IMG_2322

Dentro del equipo de Escudería Norte, los «reyes de la gomita», los hacedores de tanta hoja de ruta y competencia de regularidad para autos históricos en Argentina, Eduardo Casasnovas lleva la voz cantante. Entre los que más o menos a menudo cubrimos estas competencias (Mil Millas Sport, Gran Premio Histórico, y el resto de carreras […]

Diego Speratti
24/03/2015 7 Comentarios

Se viene el Desafío Vintage

Vintage en Belle Vue

Qué difícil es encontrar eventos en el calendario ideados para los autos vintage y los preguerra en general. Si cuando los coleccionistas empezaban a juntarse, y los primeros clubes de clásicos a formarse, los vehículos de preguerra eran los grandes protagonistas de las salidas, con los años todo fue cambiando. No todo parece estar perdido […]

Staff RETROVISIONES
14/06/2011 3 Comentarios

Lancia del día #17

Fulvia

Lancia Fulvia terza Serie. Savona, Italia.

Qui-Milano
15/07/2013 8 Comentarios

Corresponsal en el Rally de la Montaña

qué come Cinturonga?

Mientras como un cacho de carne con mermelada en una especie de restaurant en Philadelphia me llegó una foto anónima a nuestra redacción itinerante de Retrovisiones llamada MacBook. La imagen promete información de la carrera. Nos intriga saber de qué es la A y sobre todo… ¿Qué come Cinturonga?

Cristián Bertschi
17/08/2010 8 Comentarios

Tirasso, en el nombre de «Le Patron»

Coppoli, el hombre que viste y calza

En el curso del año 1924 Ettore Bugatti ya estaba enterado de las bondades de los mercados argentino y brasileño en lo que a venta de automóviles se refería. Así lo indica la correspondencia existente entre «Le Patron» y Juan Bautista Lavarello, un acaudalado sportsman porteño a quien Bugatti -insistentemente- le ofrecía ser representante en Buenos […]

Lao Iacona
09/08/2010 3 Comentarios

Las bolitas de Ferrari

Captura-de-pantalla-2015-07-23-a-las-16.24.41

Con este tema pasó lo que generalmente pasa cuando uno anda distraído. Probablemente desde que vi un V12 Ferrari viejito por primera o segunda vez, me llamó la atención las dos bolitas negras sobre la tapa de válvulas, en realidad cuatro, dos por lado. Nunca, durante años, le presté atención a estas piecitas hasta que me […]

Cristián Bertschi
23/07/2015 5 Comentarios

Viento en contra 2013 Tomo 3

IMG_8225

a la vera del Alumine  Esa mañana amaneció con una niebla de la madonna, así que el arranque se pospuso una hora. No vino mal para dormir un poco más y recobrar fuerzas. Hasta aquí los autos se habían comportado de mil maravillas, y solo nos ocupábamos de hacerles los religiosos mimos todas las tardes: […]

Manuel Eliçabe
12/08/2013 7 Comentarios

Ferrari Track Day 2012: los ganadores

ferrari logo amarillo

Luego de mucho pensar (en otras cosas), decidimos que los ganadores de pases para el Ferrari Track Day del próximo viernes serán los primeros diez en haber respondido a la consigna de este post: click aquí. Mariana VIVIANA01 marianooctubre morgan PedroSM fran_lfc Perverso franquito01 mondeoV6 Kuve Quienes estén en la lista deberán mandar durante el […]

Cristián Bertschi
05/11/2012 20 Comentarios

Villa D´Este 2013: la perfección hecha automóvil

P1000187 copy

Lancia Aurelia B24S spider Pininfarina 1955. Uno de los autos más lindos de toda la historia, perfecto en cada aspecto, se mueve con un V6 a 60° de 2.400 cc. En un hermoso color “rosso Lancia” con interiores en cuero color “biscotto”, paragolpes divididos, parabrisas náutico tipo Riva Acquarama, ruedas de rayos Borrani, sin manijas externas para no […]

Qui-Milano
09/06/2013 21 Comentarios

Soñando por correr

fanclus

Como todos ustedes, soy un apasionado por los autos; clásicos, modernos, de motores chicos, grandes y por sobre todos, los de carrera. Durante toda mi vida quise correr en autos y lamentablemente es una actividad que siempre me dejó una excusa a mano que me impidió hacerlo. Pero un buen día las dejé de lado […]

Lectores RETROVISIONES
13/07/2012 6 Comentarios

Adiós a Jean Sage

Sage quinto de izquierda a derecha

A los 68 años murió en Annecy, Francia Jean Sage, ex director deportivo del equipo Renault F1. Sage fue siempre un apasionado de los autos y especialmente de las Ferrari. Comenzó su carrera deportiva a los 20 años como copiloto del veterano André Simon en una Ferrari 250 GT en el Raly del Mont Blanc. […]

Cristián Bertschi
14/10/2009 1 Comentario

337 días, 337 clásicos

Dodge placa

Camión Dodge 41-47, Estación San Fernando (Mitre), Provincia de Buenos Aires, Argentina.

Diego Speratti
26/05/2011 1 Comentario

De interés nacional

ANDINO

Luis Varela, el diseñador del Andino GT, uno de los mejores Gran Turismo diseñado y construido en la Argentina, abre su archivo de los años sesenta y setenta para que podamos acercarnos a esa apasionante época de la industria automotriz argentina que lo tuvo como protagonista. En una amena charla mano a mano con el […]

Staff RETROVISIONES
17/09/2011 2 Comentarios

La belva Cosworth

3---IMG_3287

Ford Sierra Cosworth RS 4p 2WD 1988. Sueño prohibido de cualquier “petrolhead” de finales de los ‘80’s, el Ford Sierra Cosworth, en sus varias versiones de calle, coupé 3p (que tenía un enorme alerón biplano y en Italia fue bautizado “pinnone”o “la belva” -la fiera-) o en su versión berlina 4p con tracción en 2 ó 4 ruedas. Salía de […]

Qui-Milano
05/05/2014 13 Comentarios

Uruguayos campeones

pontiac-cola590

Las estadísticas de RETROVISIONES indican que el consumo de mate se disparó exponencialmente en la expo y se han levantado voces de comerciantes indignados por el desabastecimiento de yerba en la pituca zona de San Isidro. Todo tiene una razón: en esta edición de la Autoclásica la presencia charrúa es más fuerte que nunca. El […]

Diego Speratti
11/10/2009 Sin Comentarios

Di Tella Magnette con Guido idem

Magnette

Di Tella Magnette en el vestíbulo de la empresa. A la derecha de la foto, el Ing. Guido Di Tella alguna vez devenido Canciller. Franco Cipolla.-

Lectores RETROVISIONES
08/05/2013 7 Comentarios

Que aburrido todo esto…

plin.plin,plin....

Pfff…. Qué aburrida la gente con esto de los autos viejos!!! Para que se haga un poco más llevadero me traje este libro, pero con el viento se me vuelan las hojas… Aprovecho ahora que se pararon a cargar nafta y termino el capítulo del príncipe que se transforma en sapo. Encima, ni almohadones me […]

Hernán Charalambopoulos
24/09/2012 9 Comentarios

130 días, 130 clásicos

Thames by Ford

Ford Thames E83W, Barrio Cementerio, Colonia del Sacramento, Uruguay.

Diego Speratti
30/10/2010 6 Comentarios